
1. Auténtico desayuno andaluz
Un viaje a otra ciudad es siempre un viaje a otra cultura. Y una cultura te atrae cuando puedes olerla, oírla, sentirla, verla y probarla. Y, como dicen que el desayuno es la comida más importante del día… qué mejor forma de experimenta la cultura andaluza que con un desayuno típico andaluz:
Sabroso pan tostado, aceite de oliva virgen extra, deliciosos tomates y auténtico jamón ibérico. Si además pides un aromático café con leche, puedes empezar tu día de visita turística lleno de energia.
Foto: fvanrenterghem
2. Acércate a la Giralda tanto como puedas
Como puede que ya hayas escuchado en alguna visita guiada de Sevilla o leído en tu guía turística, esta emblemática torre fue una vez el minarete de la mezquita más importante durante el mandato musulmán de Sevilla.
Una de las mejores maneras de apreciar la magnitud y belleza de esta poderosa torre es durante la noche. Alrededor de la Catedral encontrarás muchos bares u hoteles donde puedes brindar en lo alto de una magnífica terraza, muy cerca de la Giralda. Y, si tienes suerte, puedes incluso observar algunos de los cernícalos cazando insectos en la penumbra de la torre. Parece que no estén asustados de la magnífica sonoridad de sus campanas medievales.
Foto: Karen
3. Da una vuelta por el centro histórico
Es obvio que no puedes dejar Sevilla sin haberte perdido o, digamos, distraído, por algunas de las hermosas calles estrechas en la ciudad vieja. Asegúrate de llevar contigo la cámara… por qué no tomar algunas fotos de los románticos patios escondidos, las flores o las bellas fachadas. No te preocupes de mirar mucho el mapa, mejor seguir tu intuición. Y, si te pierdes, seguro que detrás de la esquina puedes encontrar un pequeño bar, donde puedes refrescarte y tener una pequeña charla con un sevillano que te ayude a encontrar el camino.
Foto: Martin Halsch
Exploramos las hermosas y estrechas calles del barrio de Santa Cruz en nuestro free tour diario.
4. Haz un picnic en el Parque de María Luisa
Como cualquier ciudad de este tamaño, Sevilla puede ser ruidosa y multitudinaria a veces. Pero puedes convertir tu viaje en algo mucho más relajante si alternas y combinas la visita turística con actividades recreativas. Por lo tanto, te sugerimos que hagas un pequeño picnic en el Parque de María Luisa. Este parque está cerca del centro, por lo que no será complicado llegar ahí. Sobre todo porque puede que ya hayas visitado uno de los monumentos principales de la ciudad, la Plaza de España, que allí se encuentra.
El Parque de María Luisa es un oasis de calma y tranquilidad en el medio de una ciudad vibrante. Puedes encontrar fácilmente un lugar con sombra donde hacer tu picnic, descansar e, incluso, tumbarte en la hierba con tu mochila como almohada, para leer un poco más acerca de la historia de Sevilla, o simplemente observar la naturaleza alrededor hasta que estés listo para una pequeña siesta.
Foto: Emilio
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